El auge de las nuevas tecnologías está cambiando los hábitos de compra de los consumidores. Lo que hasta unos pocos años parecía prácticamente imposible, a día de hoy es una realidad: ha abierto en Madrid la primera tienda sin dependientes de España.

La empresa responsable es Tudecora, líder en el sector del mueble. Miguel Ángel López, fundador y CEO de Tudecora, explica que la idea surgió ante la apertura de una tienda sin dependientes en Seattle de la mano de Amazon Go. Un nuevo modelo de negocio en el que los compradores solo tienen que seleccionar el producto y salir del local con él, sin necesidad de pasar por caja como en los comercios tradicionales.

Tudecora abrió sus puertas en noviembre del pasado año 2018. Anteriormente realizó un periodo de pruebas en un local en Guadalajara. Para acceder al interior del establecimiento los clientes tan solo tienen que utilizar una aplicación gratuita en su teléfono móvil para abrir la puerta.

Disponen de 60 minutos para ver todos los muebles. Si alguno de ellos encaja con lo que están buscando y les gusta, pueden realizar el pedido desde el propio local mediante una pantalla táctil, o incluso a través de la aplicación instalada en su teléfono.

López asegura que de esta manera los clientes toman el control absoluto de la tienda, de manera totalmente gratuita y sin un dependiente que pueda agobiarles durante el proceso de decisión de compra.

En el establecimiento cada producto expuesta cuenta con su propia etiqueta con código QR. Los objetos más pequeños, como lámparas o objetos decorativos, se pagan con la tarjeta de crédito escaneando el código. Al usar un lector de códigos QR del teléfono móvil se abre una ventana para completar el pago y que los clientes puedan llevarse a casa su compra. Por el contrario, cuando escanean el código QR de los muebles grandes, como armarios o estanterías, los usuarios acceden a un portal web en el que pueden observar los diferentes modelos y precios.

Durante la visita al local Tudecora ofrece a los usuarios la posibilidad de ser atendidos por un técnico a través de la videollamada para cualquier tipo de duda que puedan tener.

López ha recibido numerosas críticas señalando que este tipo de negocios destruyen muchos puestos de trabajo. Pero él se defiende argumentando que no se destruye empleo, sino que se transforma. Explica que el equipo es exactamente el mismo, solo que en este caso el dependiente no tiene que estar físicamente en la tienda, sino que puede atender las videollamadas de los clientes en cualquier lugar. Por lo tanto, considera que es una oportunidad fantástica para mejorar la conciliación familiar.

El fundador de la empresa señala que la principal diferencia entre una tienda tradicional y esta es que en el comercio sin dependientes solo el cliente está físicamente, de forma que no hay contacto humano. Aún así, cuando alguien solicita la presencia de un dependiente, puede concertar una cita con él y este acude al local.

Además, López explica que en tiendas pequeñas con dependientes los clientes se sienten un poco presionados ya que no pueden tocar y ver las cosas como desean. De este modo, la libertad de elección es mucho mayor.

El CEO Y fundador de Tudecora señala que garantizar la seguridad en este negocio es uno de los retos más importantes. Explica que el sistema se basa plenamente en la confianza de los usuarios. Aún así, hay que garantizar que nadie se cuele en el local o haya robos.

Para ello, el establecimiento ha instalado un sistema innovador de sensores y cámaras de videovigilancia. De esta manera, si en algún momento se detecta que alguien está robando, se le puede dejar encerrado y llamar a la policía. Además, antes de acudir al local hay que completar un formulario indicando el nombre, apellidos y DNI.

Este es uno de los mejores ejemplos sobre cómo pueden convivir el mundo online y offline. López asegura que este modelo de negocio es exportable a cualquiera que venda productos en un establecimiento físico.