Las Smart Cities son ciudades que apuestan por sistemas eficientes aplicados a sus infraestructuras. Por norma general se usan las tecnologías de la información y de la comunicación o TICS para gestionar esta infraestructura.
El concepto de Smart City conlleva un cambio de mentalidad íntimamente ligado al proceso de transformación digital que ya ha comenzado en muchos ámbitos de nuestra vida cotidiana y que, paralelamente, se traslada y amplía a nuestro entorno urbano. Cuando hablamos de ciudades del futuro, en realidad, nos referimos a las ciudades del presente.
Su objetivo es conseguir garantizar un desarrollo sostenible, una mejora en la calidad de vida de los ciudadanos, una mejor gestión de los recursos disponibles y la participación de la ciudadanía.
Fomentar el uso de paneles fotovoltaicos o potenciar el empleo de medios de transporte no contaminantes como la bicicleta, suelen ser algunas de las medidas elegidas.
Pero existen iniciativas que van más allá. La inmótica, por ejemplo, es la gestión automatizada de inmuebles con alta tecnología. Esta se puede aplicar al mantenimiento de edificios públicos e infraestructuras públicas.
Países como China y ciudades como Amsterdam, Dallas o la española Vitoria ya han invertido una gran cantidad de recursos en conseguir mobiliario, infraestructuras e incluso barrios inteligentes.
Esto representa una oportunidad de negocio para las empresas tecnológicas:
Sensores para detectar congestiones de tráfico
Monitorización de aguas y vertidos
Apps de Parking
Sistemas de inspección de puentes
Vehículos autónomos
Detección de fuegos
Sistema de iluminación inteligente
Drones y cámaras de vigilancia
Las ciudades inteligentes en España tienen sus mejores representantes en 7 urbes repartidas a lo largo de la península. La iniciativa Cities in Motion de la IESE Business school incluye las ciudades de Madrid, Barcelona, Málaga, Valencia, Sevilla, Bilbao y A Coruña, en este orden, entre las 100 mejores ciudades inteligentes del mundo.
Impulsado por el Ayuntamiento de Sevilla, el proyecto Smart City cuenta con la colaboración de entidades como Endesa o Telefónica que promoverán el ahorro energético, la mejora de la red de servicios públicos a través de la instalación de sensores en las fuentes o un urbanismo sostenible y con la participación del resto de áreas municipales.
A la hora de poner las bases para la implantación de un modelo Smart City, el primer requisito por el que tienen que apostar las ciudades es el de la conectividad de todo el entorno urbano que, a partir de ahora debe entenderse en un concepto global y que va a contar con los siguientes elementos tecnológicos:
1. E-administración y soluciones de acceso libre a plataformas abiertas para fomentar la toma de decisiones compartida con el ciudadano en el centro de la toma de decisiones.
2. Smart Citizens o ciudadanos inteligentes que participen en los procesos de toma decisiones y estén concienciados de los beneficios que les reporta el formar parte de una ciudad inteligente.
3. Sistemas de sensorización (Smart Sensors) aplicados en mobiliario público que reporten datos de forma constante para una gestión eficiente en el tratamiento de residuos, los sistemas de iluminación con paneles fotovoltaicos, la gestión eficiente del tráfico con señalización inteligente… En definitiva, Ciudades Conectadas.
4. Uso de soluciones Big Data para la recogida, interpretación y respuesta e interconexión constante con la ciudadanía a través de redes interconectadas (Smart Grid) o elementos del mobiliario público que permiten reportar cualquier incidencia, consulta o reclamación (Internet de las Cosas)
5. Edificios inteligentes (Smart Buildings) que apuesten por el ahorro energético y la generación de sus propias soluciones para su autoabastecimiento energético. Estas soluciones Smart City se trasladan a los hogares a través de sistemas de domótica que gestionan de forma eficiente nuestras viviendas.
6. Transporte sostenible tanto en los sistemas de movilidad pública como en los privados a través de vehículos eficientes (coche eléctrico, redes de alquiler de bicicletas, transporte público eficiente)
7. Gestión del urbanismo y ordenación de las ciudades basada en el aprovechamiento de los recursos y su gestión eficiente a través de soluciones como las supermanzanas que repercuten en la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos.
8. Elementos y herramientas de Ciberseguridad que garantizan la privacidad en las comunicaciones y la gestión de los datos personales que reportan los ciudadanos y que custodia la Administración.
Conscientes de que una Smart City cambia a mejor las relaciones de la ciudad con sus ciudadanos y convierte el entorno urbano en accesible, acogedor y sostenible, #DatabeerSVQ10 nos trae a Sevilla este jueves 30 de mayo seis ponencias para exponer iniciativas aplicadas a la vida urbana.
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