Las redes públicas ofrecen ventajas de conectividad que son obvias para todos nosotros. No obstante, también encierran peligros para nuestra ciberseguridad que debemos conocer.

Cuando nos conectamos a una red pública y esta resulta maliciosa, los administradores pueden interceptar nuestras comunicaciones (lo que se conoce como packet sniffing), robar nuestros datos, infectar con malware nuestro ordenador o incluso modificar nuestra información en redes sociales y transmitirla a ciberdelincuentes.

Para ello, para navegar con seguridad a través de redes públicas, sugerimos utilizar siempre una conexión VPN o Virtual Private Network

• Una conexión VPN es una red privada virtual que se extiende a través de la red pública.
• Permite que los dispositivos conectados puedan enviar y recibir datos como si estuvieran conectados a una red local.
• Cuando usas una VPN, la conexión está cifrada, los datos viajan de forma más fiable, y en general, las comunicaciones son mucho más seguras.
• Recuerda, cuando usas una VPN tus datos viajan por un servidor externo, lo que hace que sea muy difícil conocer tu identidad y localización.

• Cuando usas una VPN, garantizas la seguridad de tus conexiones y evitas que nadie pueda intervenirlas, Por ejemplo cuando estás en un aeropuerto a bordo de un tren, en una cafetería o en un parque.
• Encriptar tus datos: con una VPN tus datos no podrán ser registrados y nadie podrá identificar tus actividades y tu historia, y así podrás cuidar tu privacidad.
• Puedes aumentar tu conectividad geográfica: cuando estás fuera de España y usas un VPN puedes conectarte como si estuvieras aquí y así acceder, por ejemplo, a contenidos nacionales como diarios digitales o programas de televisión.

Existen múltiples clientes para acceder a una VPN. Muchos de ellos vienen de serie en sistemas operativos como Windows, macOS o Linux, aunque para utilizarlos has de seguir un complejo proceso de configuración.

Para hacer tu vida más fácil, puedes utilizar clientes gratuitos o de pago, que te ofrecen diferentes capacidades en función de su precio.

Puedes descargar estas aplicaciones para tus dispositivos móviles e instalarlas de forma sencilla desde los diferentes Marketplace de iOS o Android, por ejemplo. Los mismos desarrolladores suelen darte la opción de instalar la aplicación también en tu PC o portátil, a través de su página web.

Referencias del documento:
Artículo publicado en el Boletín de Concienciación del Mando Conjunto de Ciberdefensa.